Por: Gerson Adrián Cordero

Conocí al dramaturgo y poeta José Adolfo Pichardo cuando cursaba una asignatura de literatura en la universidad Nacional Evangélica (recinto Santiago de los Caballeros) en el año 2015. Mi primera impresión fue la de un señor un tanto tímido. Recuerdo que me preguntó si escribía literatura, le dije que había escrito una novela hace unos años, pero que tenía que corregirla. Desde ese día, nos fuimos acercando más. 

No era raro encontrarlo en cualquier asignatura que tuviera que ver con literatura o Legua Española. Con el pasar de los meses (José Adolfo Pichardo) se convertiría en mi principal mentor en asuntos literarios. Para ese entonces, como es de esperar, desconocía las obras de este gran dramaturgo santiaguero. Más por el hecho de que José A. Pichardo no es de estos autores que uno está acostumbrado ver  hablando de su propia obra. No recuerdo cómo tuve la primera experiencia con una de sus obras, pero cuando sucedió fue el inicio de un seguimiento ininterrumpido de la lectura de cada creación nueva que daba a conocer. 

José Adolfo Pichardo es un gran dramaturgo y no porque yo lo diga, sino por las buenas críticas que tienen sus obras. Aunque es conocido mayormente por sus obras teatrales, en la poesía tampoco se queda atrás, es un magnífico Poeta, el año pasado también publicó un libro de cuentos. En los comentarios que anteriormente lo he mencionado, siempre digo que este autor es el máximo representante del teatro psicológico contemporáneo del país. Cualquiera que lea unas de sus obras, se dará cuenta a que me refiero. 

Pego aquí dos breves comentarios que escribí a dos de sus libros.

“El nuevo libro de teatro de José Adolfo Pichardo

Este libro contiene nueve piezas literarias dignas para ser estudiadas por psicólogos. Felicidades al autor: muy pocos dramaturgos trabajan la psicología en sus personajes como lo hace Adolfo Pichardo. Empecé a leer y analizar este libro hoy, y hasta que no lo terminé no pude soltarlo. José Adolfo Pichardo envuelve sus personajes en una clase de telaraña que poco a poco lo va ahorcando. La busca del Yo, la tragedia, el engaño, la crueldad, el asesinato, la miseria, la duda , los trastornos obsesivos, son solo algunos de los factores que envuelven las mentes de los personajes de las obras de José Adolfo Pichardo. Las obras de este autor no están escritas para terminar de la siguiente manera: Y TODO FUERON FELICES PARA SIEMPRE. Adolfo Pichardo es un escritor que de verdad plasma la verdadera esencia humana en su más retorcido estado psicológico. 

Para mí, José Adolfo Pichardo es el principal creador del teatro psicológico contemporáneo de nuestro país. No hay una sola pieza literaria de su autoría que no demuestre de alguna manera el comportamiento humano en su múltiples facetas.

(Publicado el 29 de marzo del año 2019/ sobre la obra: Los demonios del pasado y otras soledades)”

“LA MUERTE DEL CREADOR

Como en casi todas sus obras José Adolfo Pichardo nos introduce en la mente retorcida de un personaje enfermo y perturbado que busca la paz de su propia existencia en los borradores de una obra que intenta escribir. José Adolfo Pichardo es conocido entre sus lectores como un autor que desgarra la mente de sus personajes de una forma retorcida. 

La Muerte del Creador narra la historia de César Virend un escritor enfermo físico y mentalmente que para escribir las obras que le llevaron al éxito, utiliza una técnica sicópata. Él tiene que asesinar para experimentar el placer que se siente al hacerlo y ver como sus víctimas reaccionan frente a la muerte (es por ello que para escribir sus obras de éxitos como LA MUERTE DEL CREADOR, se iba a una vieja cabaña en el bosque y ahí le daba vida a sus obras macabras). En una ocasión invitó a un amigo  Sacerdote a su lugar de tortura, lo amarró y le entró  la cabeza en el fuego hasta que esta se desprendió; de esta manera César Virend pudo describir en su obra el momento final de uno de su personaje que a la vez era su víctima. También tortura a su esposa la cual amarra y le corta las venas para ver como ella reacciona a la muerte. Frente a este crimen César Virend puede narrar el comportamiento de ella y hacerla una de sus víctimas en uno de sus personajes.

“Cuéntame lo que sientes al morir.  No te mueras sin decírmelo…¡Alma, Alma, Alma! Dime algo, no cierre los ojos, Alma desagradecida ¿Qué se siente morir desangrada?”

(Linda) es una detective que se hace pasar por una famosa editora. Ella presiona a César Virend para que le entregue el borrador de la obra más reciente que escribe. Su intención es que César plasme tal cual el crimen cometido a su esposa y del cual no hay sospechosos para ver si fue él, ya que con las lecturas de sus obras, ella pudo notar que las escenas de los crímenes se ven muy reales para ser solo ficticios. César, bajo la intensa  presión de su editora, al final le entrega el borrador. Linda, entonces se da cuenta que logró su cometido porque en el borrador César Virend deja claro que fue él quien asesinó su esposa. 

Adolfo Pichardo es un dramaturgo que no tiene piedad con sus personajes, casi todos terminan locos y muertos de las peores formas. Sus personajes se pelean con su propia locura. La Muerte del Creador es una obra muy profunda que vale la pena ser estudiada por criminalistas y psicólogos. 

(Publicado el 28 de junio del año 2020)”

Estos son solo algunos de los comentarios que he escrito sobre este gran escritor. 

El reconocido ensayista dominicano Andrés Acevedo escribió en uno de sus ensayos que José Adolfo Pichardo es el segundo dramaturgo más importante de la provincia de Santiago de los Caballeros, en termino provincial es cierto, pero a Pichardo al que situarlo en un lugar más alto si hablamos de él como dramaturgo de la República Dominicana. Aunque reconozco que José Adolfo Pichardo no es tan reconocido como debiera ser. Esto se debe a que no  participa en los concursos anuales de literatura (donde sería un posible ganador) que se organizan en el país, ni dice presente en las actividades que generalmente se llevan a cabo con escritores nacionales. Pichardo es un escritor reservado, que solo espera de sus obras que alguien la pueda leer y aprender algo de ella. Autores como él, de una u otra manera logran reconocimiento y sus obras son estudiadas por diferentes generaciones. Aquel que aún no conoce sus obras, les invito hacerlo, no quedará decepcionado, (pero advierto) quizás sí, frustrado. Aunque esto último, claro, en términos literarios.    

Algunos de sus libros: 

•El Octavo pecado

•La Muerte del Creador

•Teatro Fatalista

•Pablo K

•El Canto alegre de Muerte

•Danza de fantasmas

•Café

•Laura 

•Alas e Invierno

•Los Demonios del pasado y otras soledades